Imaginación - Dimión. Versión judía
Actualizado: 3 sept 2020
Este artículo lo publicamos como resultado del debate que se generó con la lectura del primer documento de Don José Mizrahi, sobre Ciencia de la Física Mental - versión judía, donde se le preguntó por la Imaginación.
Por José Mizrahi, Ciudad de México
En esta ocasión me quiero referir a la importancia que tiene la imaginación en nuestras vidas.
Húndete en las fuerzas de la inspiración. La imaginación es la madre de la esperanza…y la fe es su hija. Es la luz que penetra la oscuridad. Es la guía que encuentra el camino a través del desierto.
Primeramente, hago alusión a los premios Nobel en relación con los judíos, han sido entregados a 902 individuos de los cuales 203 eran judíos. Quiere decir que es el 22.5%. Aunque el total la población judía comprende menos del 0.2% de la población mundial, eso significa que el porcentaje de judíos premio Nobel es 112.5 veces por encima de la media.
Hoy, la persona de mayor edad en recibir un premio Nobel es el señor Arthur Ashkin, de 96 años, y es el mayor de los laureados que está actualmente en vida.
No puedo mencionar en este momento a todos los premios Nobel judíos, y solo mencionaré algunos inventos de la actualidad que merecen mi admiración y respeto: el inventor del riego por goteo, Simcha Blass, pionero israelí; el Inventor del waze, Uri Levine, israelí. ¿Qué une a estos individuos? Su imaginación creadora.
Quiero dar otro ejemplo: llegaron unas personas a un kibutz porque querían investigar cómo producían cantidades tan grandes de ciertas verduras. Los llevaron a los sembradíos y vieron un tractor trabajando y varios de ellos se sorprendieron. Dijeron que cómo era posible tener la poca responsabilidad de mandar a esa persona a manejar el tractor habiendo una temperatura en el exterior de 48°C. ¿Quieren saber la respuesta? “Señor, ese tractor está manejado por un robot”.
Debemos aceptar que cuando hay un problema, una necesidad muy grande, la falta de agua, por ejemplo, alguien tuvo la idea de hacer del agua salada agua dulce.
Los problemas y las necesidades impulsan a la mente humana a usar su imaginación creadora de donde proviene todo, menos lo que produce la naturaleza. Todos hacemos uso de nuestra imaginación creadora en varios momentos, por lo tanto, te expongo qué es la imaginación.
¿Qué es la imaginación? – Dimión. Imaginación es la facultad del alma que presenta las imágenes de las cosas reales o ideales. La imaginación es la facultad de imaginar o de conservar y aun producir en forma de imagen todo lo que nos afecta sensiblemente. Imaginativo es aquel que continuamente imagina o piensa, porque toda imagen es una idea.
El poder de la Imaginación. Las sensaciones que hemos tenido en el transcurso de nuestra vida no se desvanecen, sino que éstas se hunden en el mundo subconsciente de donde podemos extraerlas en un momento dado, ya sea voluntaria o involuntariamente como recuerdos, los cuales se producen en forma de imágenes. El poder de la imaginación depende del desarrollo de nuestros sentidos y de la capacidad de sentir.
Entonces, educar nuestros sentidos y ampliar el radio de nuestras sensaciones servirá para fortalecer y educar a su vez la imaginación y, en el momento en que requerimos de ella, nos proporciona nítidas imágenes y precisas sensaciones, pues es importante liberarnos de toda confusión perceptiva y sensorial que ya de una manera u otra afectan la imaginación.
La Imaginación Creadora. El ser humano tiene, además, la facultad de transformar las imágenes, modificarlas, seleccionarla según su fin u objetivo dado. A esto se le llama Imaginación Creadora, porque podemos imaginar sin que intervenga la voluntad, la inteligencia, los sentidos o la emoción, sino que simplemente por el poder de asociación o disociación que tiene la imaginación.
Puede decirse que la imaginación creadora es la madre de las Bellas Artes y de la literatura, de la filosofía y la ciencia de los inventos y de las técnicas y métodos para alcanzar el conocimiento.
La Imaginación Creadora, gracias a su poder, ha transformado al mundo en que vivimos y lo ha poblado con sus maravillosas creaciones, proporcionando al ser humano más amplios horizontes en donde todo “es posible”. La Imaginación Creadora es el fuego divino, el fuego del espíritu que incendia al ser humano e ilumina su mente. Es una chispa divina que el creador “Baruj HaShem” puso en nosotros y una parte infinitesimal de su poder creador.
Razón e Imaginación. Es muy importante evitar el conflicto mental que se produce cuando la imaginación, con su fuego, consume a la razón, así como cuando la razón, con su frialdad, apaga y aniquila el fuego creador de la imaginación. Es por esto que los antiguos sabios decían que el arte secreto estaba en saber manejar correctamente el agua (razón) y el fuego (imaginación) y saber equilibrarlos sin que uno consuma el otro.
El desarrollo de la Imaginación. El desarrollo de la Imaginación Creadora debe ser nuestra meta. Por ello, desde ahora llenemos nuestra imaginación con imágenes absorbentes de carácter constructivo. Una imagen constructiva atrae a otra, esa es la ley. La fuerza, combinada con la razón, imaginación y emoción actúa para el logro de una idea original. Si la imaginación presenta un panorama, no importa cuán fantástico parezca, no lo deseches, sino más bien llama a la razón a tu ayuda y reacomoda la imagen en forma tal que se haga práctica y viable.
Húndete en las fuerzas de la inspiración. La imaginación es la madre de la esperanza…y la fe es su hija. Es la luz que penetra la oscuridad. Es la guía que encuentra el camino a través del desierto.
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Nota del autor: El arte visionario de Alex Grey ha despertado en mi una gran admiración porque me da un gran ejemplo de cómo usa su imaginación creadora. Me asombra hasta qué punto puede un ser humano tener esa gran visión, esa gran imaginación que funde a todas las religiones en una sola.
El Ser Humano: Los cuadros del Señor Grey, tan detallados anatómicamente, preciosos, como una ilustración médica, presentan al hombre como un ser arquetípico, luchando por conseguir la unidad cósmica. La visión de Grey de la humanidad imperfecta pero perfeccionable es como un antídoto contra el cinismo y el malestar prevalente en mucho del arte moderno.
New York Times
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