Jefes de Estado o de Gobierno en la diáspora de origen judío
Abril, 2019
Estoy gozándome un estado de orgasmo mental. La imagen de Bogdan Chmelnitsky revolcándose en su tumba viendo a los dos Volodymyres, -Groysman y Zelensky- sentados en su trono no es para menos. Hoy son, respectivamente, Primer Ministro y presidente de Ucrania y el momento el preciso para brindar a la memoria de nuestros antepasados perseguidos por los cosacos. Hace 350 años, Ucrania fue escenario de los peores pogroms de la historia. Hoy en día, son muchas las plazas y calles bautizadas en honor al sanguinario Bogdan o al macabro nazi, Estepan Bandera. Posiblemente, dentro de algunos años, existan avenidas en honor a nuestros paisanos también. En una Ucrania donde los partidos neonazis están en auge, en parte por la pobreza y en parte por el belicismo contra el gran Oso Ruso que ya se tragó a Crimea y a las provincias orientales de Luhansk y Donetzk, también es posible elegir a dos judíos como sus máximos líderes políticos.
La imagen de Bogdan Chmelnitsky revolcándose en su tumba viendo a los dos Volodymyres, -Groysman y Zelensky- sentados en su trono no es para menos. Hoy son, respectivamente, Primer Ministro y presidente de Ucrania
Pero esta historia no es excepcional así no estemos acostumbrados a vernos figurar en política. La verdad es que hemos participado activamente de muchos gobiernos, como en el senado gringo donde, en promedio, 10% son judíos. En muchos casos, nos enorgullecemos de listar a paisanos que a sí mismos ni se considerarían miembros de la tribu. Muchos llegaron a esos cargos por estar asimilados, y otros se asimilaron para acceder a esos cargos. En épocas bíblicas tuvimos a Josef en la corte del Faraón, a Daniel en la del rey, y a Mordejai reemplazando al malvado Hamán. Existieron figuras poco conocidas como la reina de Adiabene o los reinos judíos de Yemen y el Hiyaz en la actual Arabia Saudita, pero tocó esperar milenios para repetir la historia de líderes judíos entre naciones no judías.
Tenemos “casis” como Joe Lieberman y Bernie Sanders en Estados Unidos. Están quienes apenas hace una o dos generaciones eran judíos, como Sarkozy o Kuczynsky, o la dupla increíble de Nicolás Maduro y Capriles Radonsky en Venezuela. También están aquellos que nacieron judíos, pero quienes en su infancia se convirtieron, como Benjamín Disraeli y Petre Román. El primero, el más célebre Primer Ministro Británico de su época imperial, y el segundo, el Primer Ministro de la Rumania post Comunista. Como anécdota, un conocido acá en Bogotá también optó por el bautizo durante su época universitaria porque quería llegar a presidente de la República del Sagrado Corazón. Como dirían en su nueva fe, quedó con el pecado, pero sin el género. Para cuando este artículo sea publicado, sabremos si Laurentino Cortizo Cohen fue elegido presidente de Panamá, y si Itzjak Farji lo fue en Guatemala. Para el caso, Costa Rica y Perú han tenido varios primeros ministros o vicepresidentes de la tribu.
Les comparto algunas curiosidades “recientes” de judíos jefes de estado o gobierno en la diáspora:
En el terreno del Comunismo, está Kurt Eisner y varios líderes de la República Bolchevique de Bavaria. Está también Bela Kun, líder del gobierno húngaro después de la Primera Guerra Mundial, Casi hacemos “moñona” en Rusia con Leon Trotsky. Lev Kamenev y Yakov Sverdlov fueron directores del Comité Ejecutivo de Todas las Rusias durante los primeros años de la revolución roja. Matyas Rákosi fue un temible Secretario General del Partido Comunista de Hungría entre 1945 y 1956. Ya después del colapso del sistema, Kyriyenko, Fradkov y Primakov fueron primeros ministros de Rusia post soviética. Zhvania lo fue en Georgia y Jan Fisher en la República Checa
Varios judíos ocuparon cargos virreinales en colonias británicas, como fueron los casos de Sir Matthew Nathan, gobernador del Gold Coast en Africa entre 1900 y 1904, de Hong Kong hasta 1907, y de Natal, en Sudafrica, hasta 1909. Rufus Isaacs, Marques de Reading , fue virrey de India entre 1921 y 1926. David Marshall fue Jefe de Ministros de Singapur entre 1955 y 1956. Sir Joshua Hassan, bien religioso él, fue Primer Ministro de Gibraltar durante los periodos 1964 a 1969 y de 1972 a 1987.
Vaiben Louis Solomon fue Premier de Australia del Sur en 1899. Sir Isaac Isaacs fue Gobernador General de Australia entre 1931 y 1936 y Sir Zelman Cowen lo fue entre 1977 y 1982.
Morris Fidanque de Castro fue Gobernador de las Islas Vírgenes Americanas entre 1949 y1954, cargo que también ocupó Ralph Moses Paiewonsky entre 1961 y 1969.
En Aruba tuvieron como Primer Ministro a Henny Eman entre 1986 y 1989 y después entre 1994 y 2001. Mike Eman asumió ese cargo en 2009.
Juan Lindo (un lindo apellido curazaleño), fue presidente de Honduras de 1847 a 1852, y curiosamente, de El Salvador entre 1841 y 1842. Francisco Henríquez y Carvajal fue presidente de la República Dominicana en 1916.
Julius Vogel fue Primer Ministro de Nueva Zelandia en 1876. Francis Bell repitió entre 1925 y 1930, y John Key gobernó entre 2008 y 2016.
Alessandro Fortis fue Primer Ministro de Italia entre 1905 y 1906. Luego le correspondió el turno a Sidney Sonnino en 1906 y entre 1909 y 1910. Y si eso no fue suficiente, también estuvo Luigi Luzzatti entre 1910 y 1911.
Leon Blum fue Primer Ministro de Francia después de la Segunda Guerra, entre 1946 y 1947. René Mayer lo hizo durante pocos meses en 1953 y un año después le correspondió el turno a Pierre Mendés France. También figuraron los conversos Michel Debré, entre 1959 y 1962 y Laurent Fabius no hace mucho.
Max del Valle, otro sefaradí de origen curazaleño, fue presidente de Panamá brevemente en 1967. Su hijo, Eric Arturo, también fue mandatario entre 1985 y 1988.
Poco querido fue Bruno Kreisky, Canciller de Austria, quien gobernó entre 1970 y 1983, otro país donde muchos se habrán retorcido en sus tumbas con un gobernante judío.
Ruth Dreifuss fue miembro del concejo federal suizo entre 1993 y 2002.
La actual primera ministra de Bélgica, Sophie Wilmes, desde hace pocos meses.
Para rematar la lista de anomalías, cabe destacar a Janet Jagan, ex esposa de un Primer Ministro de Guyana y a su vez Primera Ministra del país. Janet fue guyanesa por adopción, ya que nació en Chicago. Como dice una amiga, ella le quitó a Hillary el chance de ser la primera mujer americana (gringa) en ser presidente (así fuera de otro país).
Ya contamos con alguien en nuestra querida comunidad bogotana que quiere lanzarse a presidente de Colombia dentro de 20 años y con partido propio. Ojalá tengamos es honor y que nos traiga mejores días a todos.
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